Los canelones son un plato emblemático de la gastronomía catalana, pero su origen se remonta a Italia. Este plato, compuesto por pasta rellena de carne y cubierta de bechamel, ha conquistado el paladar de muchos, convirtiéndose en un clásico en la mesa navideña. Pero, ¿cómo es que un plato italiano se ha convertido en un símbolo de la cocina catalana?
El origen de los canelones
La pasta, en general, no es originaria de Italia, sino que fue traída por los árabes a Sicilia y luego se extendió por el resto de la península itálica. Sin embargo, el término canelones no aparece en los libros de cocina italianos hasta después de la Segunda Guerra Mundial.
Según el historiador y periodista italiano Marco Bolasco, los canelones son similares a un plato tradicional de la región de Emilia-Romaña, en Italia. Estos canelones están rellenos de carne de ternera, jamón, huevo y algunas hierbas, y se cocinan al horno con bechamel y tomate.
En España, los canelones también se preparan con carne de ternera y cerdo, pero cada cocinero tiene su propia receta, añadiendo ingredientes como sesos, hígados o pavo. La bechamel es un elemento clave en esta preparación, aportándole su característico sabor y textura cremosa.
La popularidad de los canelones en Barcelona
En Barcelona, los canelones se han convertido en un plato muy popular desde principios del siglo XX. En 1907, el restaurante Miramar los incluía en su menú los jueves y los días festivos. Además, en esta época, el industrial Ramon Flo comenzó a fabricar placas de canelón en su fábrica de Barcelona, bajo la marca el pavo.
La difusión de los canelones en Barcelona se debe, en gran medida, a la influencia de los cocineros italianos y franceses italianizados que se establecieron en la ciudad en el siglo XVIII y XIX. Estos cocineros introdujeron nuevas técnicas y recetas en la cocina catalana, incluyendo los canelones.
La preparación de los canelones
La preparación de los canelones requiere paciencia y habilidad. Primero, se hornean o se rusten la carne de ternera y cerdo, junto con zanahorias, puerros, cebollas y ajos. Luego, se desmenuza la carne y se mezcla con la bechamel, la cual se prepara con leche, mantequilla, pimienta, nuez moscada y jerez.
Las placas de pasta se rellenan con esta mezcla de carne y bechamel, se enrollan y se colocan en una fuente de horno. Por último, se cubren con más bechamel y queso rallado, y se hornean hasta que estén dorados y burbujeantes.
Los canelones son un plato delicioso y reconfortante, que ha encontrado su lugar en la cocina catalana. Aunque su origen se remonta a Italia, los canelones han sido adoptados por los barceloneses con entusiasmo, convirtiéndose en un plato tradicional que se disfruta en ocasiones especiales como la Navidad. Su preparación requiere tiempo y dedicación, pero el resultado final vale la pena. ¡No dudes en probarlos!
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